Por Manuel Lorenzo
La ganadería extensiva
parece estar herida de muerte si nadie lo remedia. La subida del precio de las
materias primas, el incremento de los costes de producción y la bajada del
valor final del producto están dejando al sector ganadero en una complicada
situación que puede abocar a la desaparición de muchas explotaciones.
Desde las asociaciones
agroalimentarias de Castilla-La Mancha, como por ejemplo UPA, se pide a las
administraciones que apoyen la ganadería extensiva, una forma de pastoreo
tradicional que ha contribuido a crear el típico paisaje castellano-manchego
que todos conocemos. Y que, además, abonen las ayudas pendientes a los
ganaderos, unas subvenciones que llegan con cuentagotas y que solamente sirven
para paliar pérdidas.
Francisco José Alfaro,
secretario técnico de la Fundación Consejo Regulador IGP del Cordero Manchego
ya indicó a Alimentación en Cadena, en una entrevista realizada el 29 de julio,
que “el pastoreo de zurrón, perro y careo
se está perdiendo debido a las grandes explotaciones intensivas”, señalando
que “si los políticos no tienen en cuenta
al pastoreo, éste está abocado a la desaparición y eso es malísimo para el
medio ambiente”.
Precisamente por esa labor
medioambiental es imprescindible que no desaparezca la ganadería extensiva, ya
que favorece la protección anti incendios porque el ganado limpia el monte, el
oreo de la tierra gracias a las pisadas de los animales, la fertilización
mediante el abono de las heces y la labor de polinización y diseminación de
semillas a través de la lana.
Ante esta situación que
llevaría a la desaparición de muchas explotaciones de ganadería extensiva, la
Unión de Pequeños Agricultores (UPA) reclama que se consideren una serie de
medidas para apoyar a este tipo de ganadería:
- Con el objeto de definir actividad en ganadería se debería ligar ésta a tener una dimensión adecuada en la explotación, anual, en el REGA que garantice una actividad real y efectiva, y a establecer por la Administración central. Asimismo, se deberá impedir la creación de condiciones artificiales para percibir las ayudas.
- Se considera oportuno que, para la primera asignación de derechos de pago básico, sólo se puedan asignar derechos sobre superficies de pastos para productores que fueran ganaderos en un año de referencia que sería el 2013, salvo causas de fuerza mayor e incorporación de jóvenes.
- Se considera que en el caso de las ayudas acopladas a la ganadería extensiva, estas se destinarán exclusivamente a las vacas nodrizas y terneros nacidos y criados en la explotación, así como el ganado ovino y caprino y se fijarán en valor unitario de UGM. En cada explotación se calculará el importe en función del número de UGM que posea tras convertir las cabezas de animales subvencionables, en Unidades de Ganado Mayor, en el año que se solicite. Se establecerán medidas que eviten la creación de condiciones artificiales para la concesión de estas ayudas.
- En el acuerdo marco de Desarrollo Rural (PDR Nacional), dentro de las líneas de fomento de la integración cooperativa, de las entidades asociativas prioritarias y de agrupaciones europeas de la innovación, parte de los fondos vayan destinados directamente al productor que forma parte de la agrupación o entidad asociativa prioritaria.
- Establecimiento de una medida agroambiental con carácter obligatorio, en el marco de Desarrollo Rural, en todo el Estado destinada a la ganadería extensiva por su contribución a la gestión sostenible del territorio, la conservación de los recursos naturales y la prevención de incendios forestales, de modo que se reconozcan los beneficios que estas prácticas ganaderas aportan al medio ambiente.
- La ganadería extensiva se considerará como sector prioritario en las medidas aplicables en las Zonas con Limitaciones naturales.
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